Beso: toque que se hace a algo o alguien con los labios juntos y separándolos haciendo una pequeña aspiración.
¿De verdad es esto lo que entendemos por beso?
En un beso hay mucho más que un simple contacto físico a través de los labios. El beso es la forma de demostrar afecto que tenemos por excelencia: el beso de nuestra madre, el beso de nuestra abuela, el beso de nuestro hijo, el beso de nuestro hermano, el beso de nuestra amiga, el beso de nuestra pareja,... cada uno con su significado especial y que nos hace sentir especiales cuando los recibimos.
Vamos a centrarnos en el beso de nuestra pareja... ¿Por qué no resultan placenteros los besos? ¿Por qué llegan incluso a excitarnos sexualmente?
Existen estudios que revelan que el acto de besar estimula nuestro cerebro debido a la liberación de diferentes sustancias. Cuando besamos aumentan los niveles de oxitocina, hormona que también se activa en otras situaciones como es el acto sexual, proporcionando tranquilidad y mayor sensación de vínculo con la pareja. También aumentan los niveles de dopamina, neurotransmisor muy relacionado con la sensación de euforia que se siente cuando besamos a alguien, la sensación de deseo y placer. Por otro lado, aumentan los niveles de cortisol, hormona del estrés, lo que provoca un aumento de la energía y el deseo sexual en la persona que está besando.
Por todo esto, encontramos que cuando besamos se produce en nuestro cerebro una "explosión" de hormonas muy similar a la que se produce en el acto sexual, lo que nos lleva a pensar que los besos nos resultan placenteros y nos excitan porque se da cerebralmente un patrón similar a cuando se tienen relaciones sexuales, es decir, se da una sensación de placer, de vínculo con el otro, de euforia y energía y de aumento del deseo sexual (¡aunque esto no significa que los besos tengan que llevar inevitablemente al acto sexual!).
Además, besar es un excelente analgésico y fortalece el sistema inmunológico, lo que también deriva en que las personas tengan más energía y estén de buen humor.
Como vemos, en el acto de besar todo son ventajas: nos proporciona sensaciones placenteras, genera vínculo con nuestra pareja, nos hace más fuertes y nos pone de buen humor. Y además, ¡son gratis!.
¡BESA MUCHO A TU PAREJA! ¡DISFRUTA! ¡BESA, BESA Y SIGUE BESANDO!